Las cámaras de vigilancia del Ayuntamiento de Madrid están multando a los vehículos contaminantes que circulan por la M-30.
Los vehículos sin etiqueta que no estén empadronados en la capital o no paguen el Impuesto de Tracción Mecánica de Madrid no podrán acceder a Madrid Central y tendrán que pagar una multa de 200 euros.

Las cámaras de vigilancia del Ayuntamiento de Madrid han empezado a multar a los vehículos contaminantes que circulan por la autopista M-30. Esta medida se aplica a los medios de transporte que no estén empadronados en la capital o no paguen el Impuesto de Tracción Mecánica de Madrid, aunque no afecta a vehículos de mercancías o motocicletas sin etiqueta.
Los turismos sin etiqueta que estén domiciliados y que paguen el Impuesto de Tracción Mecánica en la capital podrán seguir circulando hasta enero de 2025, fecha en la que se empezará a multar a todos los vehículos sin etiqueta.
El acceso a Madrid Central pasará a tener un coste de 200 euros, que puede alcanzar una rebaja hasta los 100 € por pronto pago.
Tras cuatro meses de aviso, el número de ‘accesos no autorizados’ a la zona de exclusión ha ido disminuyendo desde las 2.039 sanciones potenciales a las 1.883 en diciembre. Un 0,1 por ciento de accesos que se producen al día son ilegales.
Estos conductores han recibido una notificación a modo de advertencia, pero sin multa, en la que se les informaba de que a partir del día 15 de enero ya es una infracción sancionable.
Un total de 257 cámaras están instaladas en el interior de la M-30 y en la vía, a las que en pocos días se sumarán otras 207 para controlar el exterior de la autopista.
En general, 464 dispositivos de vigilancia y 37 cámaras en semáforos (‘fotorrojos’) se encargarán de la vigilancia de las vías.



